El Reglamento (UE) 1169/2011, sobre la información alimentaria facilitada al consumidor, define la fibra dietética como polímeros de carbohidratos con tres o más unidades monoméricas, que no se digieren ni se absorben en el intestino delgado humano y pertenecen a las siguientes categorías:

 

  • Polímeros de carbohidratos comestibles que se producen naturalmente en los alimentos tal como se consumen,
  • Polímeros de carbohidratos comestibles que se han obtenido a partir de materias primas alimentarias por medios físicos, enzimáticos o químicos y que tienen un efecto fisiológico beneficioso demostrado por pruebas científicas generalmente aceptadas.
  • Polímeros de carbohidratos sintéticos comestibles que tienen un efecto fisiológico beneficioso demostrado por evidencia científica generalmente aceptada.

Según las principales organizaciones relacionadas con la alimentación y la salud, los beneficios para la salud asociados con la fibra dietética son múltiples, por ejemplo, en la salud gastrointestinal y la reducción del riesgo de enfermedades no transmisibles como enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, cáncer colorrectal y menor riesgo de incremento de peso. Las principales fuentes dietéticas de fibra incluyen cereales integrales, legumbres, frutas, verduras y patatas (EFSA 2010).

 

En adultos, las cantidades recomendadas de fibra dietética varían de 25 a 38 gramos/día.

De acuerdo con el Reglamento (UE) 1924/2006, las declaraciones nutricionales están permitidas para la fibra dietética de la siguiente manera:

  • Fuente de fibra: La afirmación de que un alimento es una fuente de fibra, y cualquier declaración que pueda tener el mismo significado para el consumidor, solo puede hacerse cuando el producto contiene al menos 3 g de fibra por 100 g o por lo menos 1.5 g de fibra por 100 kcal
  • Alto contenido en fibra: La afirmación de que un alimento tiene un alto contenido de fibra y cualquier afirmación que pueda tener el mismo significado para el consumidor solo puede hacerse cuando el producto contiene al menos 6 g de fibra por 100 g o por lo menos 3 g de fibra por 100 kcal

La fibra dietética se clasifica en dos grandes grupos de acuerdo con su solubilidad: la fibra soluble (pectinas, gomas, mucílagos y algunas hemicelulosas) y la fibra insoluble (celulosa, hemicelulosas, lignina). 

 

La fibra soluble está formada por componentes que captan mucha agua y son capaces de formar geles ciertamente viscosos, siendo muy fermentable en el intestino, produciendo gran cantidad de gases. Sus principales beneficios son:

  • El gel espeso formado ayuda a ralentizar el proceso de la digestión, provocando un efecto saciante, por lo que es un auxiliar excelente en el control de peso.
  • Evita que el colesterol alimenticio se descomponga y sea digerido, lo que sirve para ayudar a optimizar los niveles de colesterol.
  • Ralentiza la velocidad a la que otros nutrientes son digeridos, incluyendo a los carbohidratos, ayudando a estabilizar los niveles de glucosa e incluso evitar niveles máximos de azúcar en la sangre.
  • Ayuda a reducir los riesgos de desarrollar enfermedades cardiacas e hipertensión.
  • La fibra soluble se puede encontrar en frutos secos, harinas integrales, guisantes, avena, salvado, cítricos, manzana, fresa y cebada.

La fibra insoluble no se disuelve y, básicamente, permanece intacta, conforme se mueve a través del colon. Debido a que la fibra insoluble no es digerida, no proporciona calorías. Este tipo de fibra:

  • Ayuda a prevenir el estreñimiento.
  • Disminuye la cantidad de tiempo que el alimento permanece en su colon, y al mismo tiempo, ayuda a eliminarlo, haciendo que ​​los movimientos intestinales sean mucho más regulares.
  • Disminuye el riesgo de desarrollar diverticulitis, lo que se produce cuando el colon forma bolsas o pliegues.

La fibra insoluble se encuentra en, la col, zanahoria, piel de manzana, remolacha, piel de patata, trigo integral, camote, nabos, coles de bruselas y coliflor.

 

En AGROLAB GROUP disponemos de las metodologías de análisis necesarias para determinar la fibra dietética total y sus componentes.

 

Author: Dra. Isabel Gomez